El exjefe de seguridad de BBVA acusa a González de contratar a Villarejo y exculpa a Goirigolzarri

Julio Corrochano, ex director de seguridad de BBVA, ha presentado un escrito en la Audiencia Nacional en el que acusa directamente al expresidente del banco, Francisco González (FG), y a su anterior consejero delegado, Ángel Cano, de la decisión de contratar los servicios de Cenyt, la empresa del comisario jubilado Villarejo, y exculpa al actual presidente de CaixaBank, José Ignacio Goirigolzarri. Asimismo, acusa al actual BBVA, que preside Carlos Torres, y a PwC de ocultar y manipular información para exculpar a estos y otros directivos.

«La decisión de contratar a esta empresa después de su presentación al Director de Comunicación por medio del Sr Corrochano como se le había indicado, fue del Presidente», sostiene el entonces jefe de seguridad en referencia a la contratación de los servicios de Villarejo tanto para espiar a las personas relacionadas con la OPA de Sacyr de 2004.

Corrochano, imputado en la causa al igual que FG, Cano y el propio BBVA, presenta este documento al juez Manuel García-Castellón para defender su inocencia. Así, asegura que él se limitó a seguir órdenes de González y Cano, y  sostiene que todas las investigaciones a clientes morosos (Luis Portillo, Fernando Martín, etc.) fueron encargadas por el departamento de riesgos que dirigía Antonio Béjar. Corrochano firmó las facturas que le pedían en su condición de apoderado del banco.

Respecto al asunto de Sacyr, declara que el encargo fue hecho por FG en persona ya que «se trataba de un tema muy delicado y confidencial, ya que sospechaba que detrás de esta OPA pudiera estar algún miembro del Gobierno». De ahí que le ordenara que «respecto a ello sólo debía hablar con Don Javier Ayuso (Director de Comunicación), con Don Angel Cano (en aquel momento Director de Recursos Humanos, Director de compras y Jefe directo del Sr. Corrochano) y con él mismo». Esta declaración se contradice frontalmente con la versión de FG, que sostiene que fue el propio Corrochano el que contrató a Villarejo por su cuenta y riesgo, y sin su conocimiento.

Es más, según el relato de Corrochano, «el presidente también me ordenó que no comentase nada del asunto con el Consejero Delegado , Sr. Goirigolzarri, porque pensaba que quizás él también pudiese estar detrás de esta OPA». Toda una exculpación, ya que la posible implicación de Goirigolzarri en estos hechos -que él siempre ha negado- era uno de los puntos oscuros de la investigación. Ángel Cano fue el sustituto de Goirigolzarri como consejero delegado cuando éste salió del BBVA, y Carlos Torres, actual presidente, sustituyó a Cano en el puesto antes de acceder a la presidencia cuando dimitió FG.

Entre los investigados por Villarejo en el contexto de esta OPA se encuentran el entonces jefe de la Oficina Económica de Moncloa, Miguel Sebastián, el vicepresidente de la CNMV, Carlos Arenillas, el presidente de Sacyr, Luis del Rivero, y numerosos políticos y periodistas.

Ausbanc y los directivos implicados

Corrochano también explica el encargo de investigar a Ausbanc. Según su relato, fue Rafael Redondo (el socio de Villarejo en Cenyt) quien le ofreció un informe sobre las actividades supuestamente ilícitas del presidente de esta asociación, Luis Pineda, que él remitió al director de los servicios jurídicos, Eduardo Ortega, quien lo encontró muy útil.

La contratación de la empresa del excomisario fue decidida por los departamentos de comunicación y de asesoría jurídica, pero el informe se disfrazó con el título «Servicio de vigilancia y protección personal de alta dirección de BBVA e instalaciones. Identificación y evaluación de la AMENAZA Yihadista al grupo BBVA» (incluyendo algunas investigaciones de estos temas) «para evitar que empleados del BBVA pudiesen informar a AUSBANC de que el Banco había colaborado en la averiguación de prácticas irregulares de AUSBANC», siempre según Corrochano.

En la operativa con Villarejo, Corrochano cita, además de a los personajes anteriores, a Javier Malagón (director de contabilidad), José Manuel García Crespo (director de asesoría jurídica), Juan Ignacio Apoitia (sustituto de Ángel Cano como jefe inmediato de Corrochano cuando aquél asciende a consejero delegado), Ignacio Pérez Caballero (responsable de la red en España que tuvo que abandonar el BBVA en junio de 2020 al salpicarle el escándalo) y Ricardo Gómez Barredo (director financiero),

Por supuesto, el exjefe de seguridad niega saber que Villarejo estaba en activo cuando fue contratado por el banco, así como que tuviera una relación de amistad anterior (pese a coincidir en varios destinos dentro de la Policía), ni mucho menos haber recibido pagos o dádivas del comisario jubilado.

Encubrimiento

Aunque Corrochano no cita directamente a Carlos Torres, sí sostiene que los gestores actuales del banco están manipulando la información con la colaboración de PwC (autor del famoso forensic) para tratar de encubrir la responsabilidad de la antigua cúpula del banco. En concreto, les acusa de ocultar información sobre las facturas de Cenyt para atribuírselas a él pese a que fueron emitidas por otros departamentos del banco.

Precisamente, el actual director de comunicación de BBVA, Paul Tobin, sí está imputado en la causa por un presunto delito contra la administración de justicia por encubrimiento respecto de la responsabilidad de Francisco González, al no entregar al juez las carpetas donde guarda toda la información del caso Villarejo y los metadatos de la misma (esenciales para la trazabilidad de los archivos y para descubrir si algunos han sido borrados).